Con la inteligencia artificial o IA, se dota a las máquinas de la inteligencia y capacidad para hacer tareas de los seres humanos. Es una simulación de la aplicación a los robots de la inteligencia humana. Otro aspecto es importante en la definición de la I.A. es que las máquinas son inteligentes y pueden aprender por sí mismas.
Hoy en día estamos rodeados de máquinas que ejecutan tareas que antes hacíamos nosotros, desde coches que conducen solos a robots que hacen trabajos en las empresas o máquinas para cobrar en el supermercado
El uso de la inteligencia artificial es cada vez mayor. Además, parece que continuará y en 2025 acaparará la inversión en tecnología de las compañías.
La aplicación de la IA no es nueva; en las empresas ya se ha utilizado en las fábricas para la automatización de procesos. Lo que ocurre es que ahora se intenta que las máquinas sean más autónomas. Esto se podría conseguir con la instauración de 4 puntos importantes. La inteligencia artificial debería tener las siguientes propiedades:
Todavía, sin embargo, no hay una estrategia unificada por parte de las empresas para esta aplicación de la I.A.
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Estas son algunas de las implicaciones del uso de la IA en las compañías:
La I.A es clave para las empresas en los puestos de trabajo, fundamentalmente en la automatización. La automatización de los procesos es algo en el que la I.A es una gran ayuda. Los robots pueden participar cubriendo puestos en la cadena de montaje, no sólo, por ejemplo, de una empresa de automoción, sino también en una de fabricación de smartphones.
Otra área en la que puede usarse la I.A es en el tratamiento de los datos. Las empresas tienen muchísimos datos no estructurados, que pueden ser presentados, ordenados y tratados por softwares inteligentes.
La inteligencia artificial también sirve como soporte para el equipo humano. Aunque pueda dudarse de la correcta coordinación entre máquinas y seres humanos en el lugar de trabajo, lo cierto es que, como pasa en sectores como la atención al cliente, los robots sirven de ayuda a las personas, ya que pueden analizar los perfiles de los clientes y hacer recomendaciones en el trato con ellos.
Existen varias herramientas y estrategias en el uso de esas herramientas para aprovechar la A.I.
La inteligencia artificial puede aprovecharse en una empresa de varias formas. Te sugerimos algunas de ellas
Iniciar un proceso de incorporación de inteligencia artificial en una empresa u organización conlleva una repercusión en todos los ámbitos de ésta, especialmente en el de las personas que la constituyen. Se produce un cambio, y ese cambio debe gestionarse bien, para que los empleados no se sientan fuera del proceso.
Lo difícil de hacer cambios en empresas, bien sean digitales, de estrategia o de productos, no son tanto las cuestiones de tipo tecnológico, sino las humanas.
El principal consejo es que cuanto más integrado, bien tratado y con confianza se sienta un empleado, mejor se adaptará a los cambios. Ya que el ser humano busca más la estabilidad que el cambio, según la psiquiatría, cuando se siente en un ambiente de confort y confianza, puede sacar lo mejor de sí mismo
Las organizaciones, sin embargo, no tienen en general agentes de cambio, un rol que requiere entrenamiento. Los líderes tienen que hacer normalmente este papel, que, además, precisa de un tiempo para que surta efecto.
Gestionar el cambio desde el lado humano en el mundo de las A.I es algo en lo que ProsciⓇ tiene experiencia. Hay que recordar que los intentos de generar conocimiento sólo son efectivos cuando los individuos desean participar en el proceso de cambio y buscan el conocimiento que los ayude a tener éxito.
Para conseguir el cambio desde el lado de las personas, nos apoyamos en los siete conceptos del cambio: emisores y receptores, resistencia y confort, autoridad para el cambio, sistema de valores, cambio progresivo vs cambio radical, la respuesta correcta no es suficiente y el cambio no es un proceso.
Descubre nuestro método y ten en cuenta que el cambio organizacional se consigue cuando cada persona transita de forma ágil, rápida y eficaz por los cambios.